Tantos momentos desagradables que no pude evitar. Tantas malas noticias que recibí y que me marcaron muchísimo. Tantas decepciones inesperadas, dolorosas, amargas; de personas, y relaciones que jamás imaginé que sucederían; pero finalmente, así fue. Tanto tiempo perdido en personas que no lo merecian. Tanta angustia, para nada. Tantas circunstancias que hoy hacen que sea como soy; que hoy me hacen sentir así: arrepentida y sola. Pero.. ¿Cómo se vuelve? ¿Cómo se evita? ¿Cómo se cambia? No, no hay chance.
No puedo conformarme con la simple idea de mirar hacia adelante. Hoy no puedo ver nada ahí adelante. Para mí no hay adelante, simplemente, una pared. Una pared que no me permite ir a ninguno de los lugares que quiero ir; que me hace presa de esta situación, de esta pérdida de tiempo, vida y ganas; que me debilita... que ya no sé ni cómo derribarla. No puedo pedir ayuda, porque tampoco sé si serviría...
Es algo inutil, y agotador...
tiene que acabar
pero es imposible vivir del recuerdo,
pero cuesta mucho empezar algo nuevo
pero cuesta mucho empezar algo nuevo
2 comentarios:
capaz que no hay que mirar hacia delante y la idea sea mirar en dónde pisan tus pies en este momento y levantar la cabeza y girarla lo más que puedas para ver qué te rodea. porque hay mucho más que eso que decís.
el paso anterior ya está dado, y ahora estás acá, y si te vas a replantear algo que sea a dónde iban esos pasos y a dónde querés ir vos ahora, desde ese lugar. la pared seguro está ahí y podés no chocarte, el siguiente puede ser un salto
pero ni idea, digo
y aparte te amo lulita
Que buena forma de no dejarme pensar una solución, tu texto.
¡Seguí escribiendo, pequeño crustáceo!
Publicar un comentario